lunes, 17 de julio de 2023

La Primera Vez




Hay una primera vez para todo 

como la primera vez 

que hiciste el amor 

en la habitación de un hotel

a ritmo de Bob Marley 

contra la pared 

con todos tus sentidos y sensibilidad. 


Tal y como está España 

al sexo y al amor 

lo llaman guarradas. 

Y al odio lo llaman Familia. 

Como la de El Padrino. 


Hay una primera vez para todo. ´

Para ser un drogadicto 

para ser un vago y un maleante. 

Para vestirse de blanco o de negro. 

De rosa o rosa púrpura.

Para ser o sentirse hombre o mujer. 


España se empeña en poner de ejemplo 

al Cid, a Franco, a Primo, o a una polla cualquiera 

eréctil pero sobre todo fértil para sus abonos ´

en el Club de Campo, o en el campo de Golf. 


Hay una primera vez para todo. 

Para hacer el amor mientras te lo hacen. 

Para drogarte con total libertad 

para equivocarte o no, las veces que sean. 


Para enamorarte, para desengañarte 

de esos binomios 

que nos han llevado a tanta mierda. 


Hay una primera vez 

para sentir lo que dices en las redes 

para quedar bien 

sin saber muy bien porqué. 

Hay una primera vez

para decidir si te quieres quedar 

o te quieres ir... 


Pero parece que todos y todas 

tienen tan claro todo ´

que no hay primera vez. 

¡Si lo hemos probado todo! 


Y casi nadie

en realidad 

es consciente 

de lo que dicen con sus palabras. 

Las consecuencias de estas 

y la responsabilidad que conllevan.


Hay una primera vez para todo 

para disfrutar de tu cuerpo

para ser consciente de él;

seas hombre o mujer. 

Trans o lo que sea, joder. 


Hay una primera vez 

para todos y todas. 

Para lo que no hay una primera vez 

es para que te violen 

y hagan una ideología de ello 

como Manadas de perros rabiosos. 


No hay una primera vez 

para el Fascismo. 

No la hay. 

Porque debería ser la última vez. 

Y sin embargo la democracia 

ha permitido 

que perdure en nuestra sociedad 

como un dogma, como una autoridad. 


Víctor Cuetos, Xixón, XXXX