martes, 24 de marzo de 2020

28 días después


Veintiocho días después, veintiocho semanas después... Siete días después de hacernos la entrevista y contra todo pronóstico debido a la Crisis del Covid-19 salimos en los medios presentando un proyecto editorial y su primera referencia editorial.
Al día siguiente comienzan a aplicar el Estado de Alarma en todo el país y todo cambia, día tras día, nos enfrentamos a una montaña rusa de emociones, de informaciones, de estímulos que podemos sentir pero no podemos tocar.
Al séptimo día y justo cuando emiten la entrevista en la TPA la calle se convierte en un reino animal en el que el canto de los pájaros prevalecen sobre el ruido del tráfico, en el que podemos ver a través de las imágenes como la naturaleza va recuperando el terreno que había perdido y que volverá a perder.

Jabalís en la Ciudad Condal, Pavos reales en la capital.
La naturaleza está más cerca que nunca y podemos sentir sus latidos, escuchar su respiración, ver su cielo límpido y azul. El silencio nos da la posibilidad de escuchar hasta nuestros propios pensamientos. El ruido pasa a un segundo plano mientras vemos la vida desde nuestras ventanas.

Nos asomamos al mundo y nos reconocemos sin tocarnos...
Ahora imagínense un mundo así pero que pudiéramos salir, imagínense que cada cierto tiempo dejamos de producir bienes y servicios, dejamos de contaminar el medio y confinamos el miedo al reino de los temores.
Háganse esa pregunta, al menos, porque ya no nos queda mucho tiempo y cada vez va ser más evidente lo vulnerable y frágiles que somos; seamos conscientes de lo virulenta y destructora que puede llegar a ser nuestra forma de vida; para nosotros y nosotras, para el medio y para todos sus seres vivos.
Hay dos escenarios posibles en este momento, uno completamente distópico, y otro más utópico; el de una sociedad y una comunidad que es capaz de pararlo todo por la salud y la supervivencia del mundo y todos sus seres vivos. Y que es capaz de tomar esa decisión por encima de multinacionales,megacorporaciones, bancos, financieras, ibex35... .
Todo el poder para el pueblo/todo el poder para lo público.

sábado, 21 de marzo de 2020

Yo no disparé a Andy Warhol


Ahora que parece 
que todo el mundo 
quiere ser famoso... 
desde su ventana. 

Ahora que Andy Warhol 
y su minuto de fama 
es nuestros DIOS REDENTOR. 
Y que es cuestión de tiempo 
o de gustos 
que acaben ustedes 
disparándose los unos contra los otros. 

Ahora que todo parece 
mentira 
aunque nunca haya sido
todo
tan real... 

Creo qué...
es hora de hacer 
un agujero en la tierra 
meter la cabeza 
y no sacarla 
hasta que todo pase. 

Víctor Cuetos, Xx, XXXX