lunes, 24 de diciembre de 2007

Copyright





Siento defraudaros...
Hoy he visto a Baco tirado en un bordillo
nadando entre su vómito
pidiendo a gritos que le diesen otra cerveza.
Afrodita vendiendo armas de destrucción MASIVA.
A Zeus trabajando para las compañías eléctricas
y haciendo algún chanchullo para las operadoras
de telefonía móvil. 

Hoy he visto a vuestros ídolos rogar
ante un dios más dinero. 
Y malditos aquellos que se enfrenten a vuestra cultura
Autoridades autorizadas
Facsímiles de vuestro verbo
Acaso os otorgáis la verdad absoluta negando la de otros. 

Hoy os he visto hurgar en vuestros bolsillos
Y utilizar la ética, la dignidad
de legitimación de la usura.
No seré yo el que vos diga
que Internet es utopía
y el copyleft vuestra ruina. 


Cuetos Víctor, Xixón. 



domingo, 23 de diciembre de 2007

Soberbia





Canto para que los pájaros no me olviden
para que los sabuesos dejen de ladrar.
Conjugo mi jugo contrito para los más aviesos.
Miro a mi gata y me pregunto;
Si no tendrá algún verso que ofrecerme
para matar el aburrimiento. 

Este tedio de seda que se enlata en un altavoz
que suena a Tom Waits o Coltrane 
y el abismo se hace luz.
El color de un dulce y el amargor de un solo
pueblan mi habitación. 
Una neblina de palabras
bailando en el espesor de los sueños. 

Quiero y no puedo contarte al oído
que me endurezco
que ya no me encuentro
en este traje de monje tibetano.

Sin control
alzo la voz
las paredes rebotan.

Disculpen las molestias
Hoy es víspera de nochebuena
Y no encuentro mi traje de Papa Noel
ni mis zapatillas de andar-por-casa. 

Cantaré otra vez para que mis huesos
no se oxiden para que se callen
los que tanto ruido hacen 
con sus cadenas de oro 
con sus relojes inteligentes; 
seguro que más inteligentes 
que todos ellos. 

Cantaré, para oírme mejor 
para no olvidarme 
de los que importan
por los que sobran. 
Para no caer 
y en todo caso 
o en cualquiera de ellos; 
caer de pie. 

Para que se callen, 
para que no se olviden 
para que dejen de ladrar.
Los perros, sus cadenas
y sus putos relojes seguramente 
más inteligentes que todos ellos. 



Víctor Cuentos, Xixón, Xxxx.