La vida es una cuestión de
probabilidades
de ensayo y error
sigue habiendo unas reglas clásicas
que por viejas que sean, funcionan.
Como la bola que se desliza por la
ruleta
y cuando cae en el cero todo vuelve a
empezar.
Hagan sus apuestas
inviertan todo su dinero
cuenten los años por fichas
que la banca gire la ruleta
y veamos donde se situa
y no se les ocurra pedir un crédito
basura
apuesten su vida ; una y otra vez.
Dejen sus bienes e inmuebles
sus propiedades
sus objetos personales
en una tienda de empeño.
Cero
es donde acaba y donde empieza todo
cuantos grados tiene que girar el mundo
para que tu y yo nos conozcamos.
¿Díganme?
Sigue siendo una cuestión de
probabilidades
pero no sé que número ponerte
¿Y cual es el mío?
No me gusta la banca
ni sus intermediarios
ni las comisiones
ni los créditos basura
ni los seguros de vida
prefiero arruinarme
apostar mi vida
poner el reloj en hora
y empezar de cero.
Orbitar alrededor del Cero
y gravitar en su redondez
sus contornos me invitan a sumarme
a multiplicarme
a ser una sucesión de números primos
en un número de teléfono
en un número de teléfono
y sus almas gemelas.
No sé que número ponerte
¿Y cual soy yo?
Teniendo en cuenta que...
la vida es una cuestión de
probabilidades
para los que no pueden elegir.
¿Habra que poner el rejoj en hora?
¿O qué?
Cuetos Víctor, 2015, Xixón