Somos el producto interior bruto
somos los que movemos el mundo
ocho horas o diez o doce o trece
o incluso catorce
con cinco para domir
y un par de horas para vivir.
Lo justo para emborracharse
salir
tocarle las orejas a los que quieres
amar sin pedir nada a cambio
el justo intercambio
por el que uno puede morir
y dejarse la piel
y las espinas
de las cicatrices
por las palabras
las emociones
que diste
y digo diste
sin pedir nada a cambio.
A cambio
a cambio
darás tú vida
y lo que haga falta.
Somos el producto interior bruto
el fuego
la rabia
los corazones
que laten
sin saber
la circulación
el tráfico
somos
y digo somos
somos
y digo somos
somos
lo que somos.
Somos fuertes
somos gentes
arraigadas
solo nos falta
ser como un compás
y trazar el radio
la radio
y el compás
al compás del mundo.
Somos el puto compás del mundo.
Somos el producto interior bruto
la deuda que llevas contigo
tú que te levantas en un palacio
y parece que todo es el paraíso
pero nosotros
los que movemos el mundo
nos levantamos
todas las mañanas
para que tú puedas
beber champán
comer marisco
y dormirte con la puta
más cara del mundo.
Víctor Cuetos, Xx, 2017
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